Santa María de San Ignacio, Claudina Thévenet; Fundadora de la Congragación de las Hermanas de Jesús María.

3 DE FEBRERO

Claudina Thévenet nació en Lyon; Francia el 30 de marzo de 1774. Fue la Segunda en una familia de 7 hijos. Le llamaban Glady.  Cuando cumplió 15 años estalló la Revolución Francesa.

En enero de 1794, asistió a la ejecución de dos de sus hermanos, condenados a muerte por represalia, después de la caída de la ciudad. Las  últimas palabras de ambos fueron para ella: « Glady, perdona, como nosotros perdonamos ». Esas palabras fueron base fundamental de la elección de vida de Claudina.

En adelante se dedicó a la ayuda de innumerables miserias que la Revolución había producido. Para Claudina, la causa principal del sufrimiento del pueblo era la ignorancia de Dios y esta reflexión despertó  en ella el compromiso de darlo a conocer a todos.

Su elección se inclinó hacia los Niños y jóvenes principalmente; a quienes inculcó el  amor  a Jesús y a María. El Padre Andrés Coindre, le ayudó a conocer la voluntad de Dios sobre ella y fue decisivo en la orientación de su vida.

En una ocasión el Padre Coindre se encontró en el atrio de la iglesia de San Nizier, dos niñas pequeñas abandonadas y temblando de frío. Las condujo a Claudina quien no vaciló en ocuparse de ellas.

La compasión y el amor hacia las niñas abandonadas son el origen de la Asociación la  Providencia de San Bruno en Lyon; Francia hacia 1815. Algunas compañeras se unieron  a Claudina; elaboraron un Reglamento y pronto fue elegida como Presidenta. Tomó el nombre de María de San Ignacio.

El 6 de octubre de 1818, el Padre Coindre y María de San Ignacio; fundaron la Congregación de Religiosas de Jesús-María. En 1820 la naciente Congregación se instaló en Fourviére; Francia. Hacia 1823 recibieron  la aprobación canónica para la Diócesis del Puy y en 1825 para la de Lyon.

La prioridad de la Congregación fue recibir a los niños pobres o abandonados, a fin de brindarles una educación inicial y en seguida, enseñarles un oficio, todo ello junto a una instrucción moral y religiosa. María de San Ignacio y sus compañeras fundaron pensiones para las jóvenes de clases muy bajas y aumentaron los estándares de educación cristiana a todas las clases sociales.

María de San Ignacio  realizó nuevas construcciones, entre ellas la de la Capilla de la Casa Madre, al mismo tiempo que se dedicó a la redacción de las Constituciones de la Congregación. Las estaba ultimando pero ya no lo logró porque murió el 3 de febrero de 1837 a la edad de 63 años.

Cinco años después de la muerte de María de San Ignacio, la Congregación Jesús- María llegó a la India hacia 1842. En 1850 entraron a España y en 1855 llegaron a América sobre Canadá. Actualmente se encuentran en los cinco continentes. La Madre María de San Ignacio Claudina Thévenet,  fue beatificada el 4 de octubre de 1981 por San Juan Pablo II y posteriormente canonizada por el mismo Santo el 21 de marzo de 1993.