San Perfecto de Córdoba
San Perfecto de Córdoba, Presbítero y Mártir
18 DE ABRIL
Perfecto del latino el integro, completo
Perfecto nació de padres Cristianos en Córdoba, cuando la región estaba dominada por los moriscos en el califato Omeya, poblado musulmán. Perfecto aprendió y conoció el idioma árabe; fue vinculado a la Iglesia de san Acisclo donde se formó y se ordenó de sacerdote.
El cristianismo estaba permitido sin obtener el reconocimiento. En el 850 el padre Perfecto fue acusado por dos musulmanes de reconocer que Jesús era más importante que Mahoma. Le llamaron traidor y fue conducido ante el Cadí, quien lo mando a la cárcel.
Sufrió innumerables martirios y poco después fue condenado a muerte. Junto al Gaudalquivir, el 18 de abril del 850, en el sitio que se llamó «Campo de la Verdad» por los muchos mártires que se coronaron, el padre Perfecto fue degollado por odio a la fe que profesaba.
Sus últimas palabras fueron de alabanza a Cristo y de condena a Mahoma. Fue enterrado en la Iglesia de san Acisclo. Sus restos fueron trasladados a la iglesia de san Pedro hacia el año de 1124.
Su muerte ejemplar alentó a muchos cristianos acorralados y miedosos. Desde este martirio, hubo quienes se acercaron voluntariamente a los jueces alzando su fe en el amor a Cristo.
El martirio de San Perfecto fue uno de los primeros del periodo de persecución de los muslmanes a los cristianos en Al-Andalus, que comenzó en el 850 bajo el dominio de Abderramán II, y que continuó bajo el reino de su sucesor Mohamed I, siguiendo de forma intermitente hasta el año 960.