San Pedro y San Pablo; Apóstoles - Encuentro con tu ángel

San Pedro y San Pablo; Apóstoles

San Pedro y San Pablo; Apóstoles

29 DE JUNIO

Pedro, Del latín piedra o firme como la piedra.
Pablo, Del latín pequeño u hombre de humildad.

San Pedro y San Pablo son apóstoles, testigos de Jesús que dieron un gran testimonio. Considerados columnas del edificio de la fe cristiana; dieron su vida por Jesús y gracias a ellos el cristianismo se extendió por todo el mundo.

Pedro fue un galileo de oficio pescador; su nombre original fue Simón. Se estableció en Cafarnaúm. Jesús lo llamó para dar a conocer a los hombres el amor de Dios y el mensaje de salvación.

Pedro aceptó, dejó su barca, sus redes y su casa para seguirle. Jesús lo nombró Cefas que significa “piedra” y le dijo que sería la piedra sobre la que edificaría su Iglesia.

Pedro fue de carácter fuerte e impulsivo; no comprendió a Jesús cuando habló acerca del sacrificio, cruz y muerte. Le prometió a Cristo que nunca lo negaría, tan sólo unas horas antes de negarlo tres veces.

Vivió momentos muy importantes junto a Jesús: lo vio cuando caminó sobre las aguas, presenció la Transfiguración del Señor, estuvo presente cuando aprehendieron a Jesús y le cortó la oreja a uno de los soldados atacantes.

Negó a Jesús tres veces y después se arrepintió de hacerlo, fue testigo de la Resurrección; Jesús después de resucitar, le preguntó tres veces si lo amaba y las tres veces respondió que sí, Jesús le confirmó su misión como jefe Supremo de la Iglesia.

Pedro estuvo presente cuando Jesús subió al cielo en la Ascensión; recibió al Espíritu Santo el día de Pentecostés. Con la fuerza y el valor comenzó su predicación del mensaje del evangelio. Contribuyó en la conversión de los gentiles no judíos y realizó muchos milagros en nombre de Jesús.

Pedro murió en Roma, donde fue Obispo. Allí fue martirizado, crucificado de cabeza, bajo el mandato de Nerón. Escribió dos cartas o epístolas que forman parte de la Sagrada Escritura.

San Pablo fue judío de raza, griego de educación y ciudadano romano. Su nombre hebreo fue Saulo. Nació en la provincia romana de Cilicia, en la ciudad de Tarso. Hombre muy inteligente y preparado. Estudió en las mejores escuelas de Jerusalén.

Fue un fariseo muy estricto, que consideró a los cristianos como una amenaza para su religión judía. Se dedicó a combatir a los cristianos. Los jefes del Sanedrín de Jerusalén le encargaron encarcelar a los cristianos de la ciudad de Damasco.

En el camino a Damasco, se le apareció Jesús en medio de un gran resplandor, cayó en tierra y oyó una voz que le decía: “Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?”; entonces comprendió que Jesús era verdaderamente Hijo de Dios y que al perseguir a los cristianos perseguía al mismo Cristo que vivía en cada cristiano.

Saulo recibió el bautismo cristiano con el nombre de Pablo. Fue a Jerusalén y se puso a la orden de San Pedro. Es considerado el “apóstol de los gentiles” porque llevó el Evangelio a todos los hombres, no sólo al pueblo judío.
San Pablo escribió catorce cartas o epístolas que forman parte de la Sagrada Escritura. Al igual que Pedro, fue martirizado en Roma. Le cortaron la cabeza con una espada, como era ciudadano romano, no podían condenarlo a morir en una cruz, porque era una muerte reservada para los esclavos.

La fiesta de San Pedro y San Pablo ha sido conmemorada el 29 de Junio desde los primeros cristianos. El sentido de tener una doble fiesta es recordar lo que estos dos grandes santos hicieron, aprender de su ejemplo y pedirles en este día especialmente su intercesión por nosotros.