San Pablo de la Cruz - Encuentro con tu ángel

San Pablo de la Cruz

San Pablo de la Cruz; Presbítero Místico del Calvario; Fundador de la Congregación de los Clérigos Regulares de la Cruz y de la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo.

19 DE OCTUBRE

Pablo. Del latín pequeño u hombre de humildad.

Pablo Francisco Danei Massari nació el 3 de enero de 1694 en la pequeña ciudad de Ovada, al norte de Italia. Fue hijo de un pudiente comerciante, por lo que su niñez y juventud fue normal, religiosa y festiva.

Cuando Pablo tenía 19 años de edad, su vida cambió por medio de un sermón que escuchó del párroco de su pueblo natal. Desde entonces su inclinación a la vida consagrada fue decisiva, acompañado de la práctica en la penitencia y la oración diaria.

En 1716 el Papa Clemente XI (once) invitó a la cristiandad a una cruzada contra los turcos, Pablo que quería morir mártir, se alistó voluntario y así pasó algún tiempo en cuarteles y campamentos.

Convencido de que ese no era el servicio que Dios le pedía, regresó a la casa de sus padres. Cuando Pablo cumplió 26 años, sintió el llamado de Dios para la fundación de una orden religiosa.

El 22 de noviembre de 1720 en una ceremonia sencilla, Monseñor Gattinara, Obispo de Alejandría, revistió con el hábito negro de ermitaño a Pablo quien tomó el nombre religioso de Pablo de la Cruz.

Los siguientes meses los pasó en distintas ermitas de las cercanías donde vivió en soledad; dio catecismo a los niños en los lugares vecinos, predicó los domingos e incluso organizó una misión.

La misión de Pablo de la Cruz lo llevó al padecimiento en carne propia de los dolores de los pobres, a quienes sirvió; especialmente a los enfermos. Se le unieron más compañeros que se hicieron llamar “Los pobres de Cristo”.

Pablo de la Cruz tuvo una manifestación de la Virgen María, quien le dio a conocer el hábito negro, el estilo de vida contemplativa y el escudo de la futura congregación. Con el tiempo él y sus compañeros viajaron de pueblo en pueblo predicaron las misiones y sirvieron a los pobres y enfermos.

Pablo de la Cruz se fue a la Santa Sede, en Roma; en busca de la aprobación de las Reglas de la Orden de los Pasionistas; pero una vez ahí, prestó sus servicios en el Hospital de San Gallicano cuyo Director le aconsejó su Ordenación sacerdotal.

Después de un breve curso de Teología pastoral, en junio de 1727 fue ordenado sacerdote en la Basílica de San Pedro por el Papa Benedicto XIII (trece). El Padre Pablo de la Cruz regresó a su labor misionera. El aumento de candidatos hizo posible la construcción del primer convento de la naciente Congregación, el cual, por innumerables dificultades, fue inaugurado hasta 1737.

De Regreso a Roma sostuvo una audiencia con el Papa Benedicto XIV (catorce), quien aprobó las reglas de la Orden hacia mayo de 1741 tomando el nombre de la “Congregación de la Pasión”; también conocida como Pasionistas, destinada a la vida contemplativa y a las misiones de evangelización; nombre inspirado en la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo.

El Padre Pablo se destacó por su amor a la Eucaristía, su penitencia, su infatigable oración y predicación, por su gran actividad apostólica: 200 misiones y 80 tandas de ejercicios espirituales. Mantuvo contacto con un gran número de personas que solicitaron su consejo en la vida espiritual, a quienes él sirvió especialmente por correspondencia.

A lo largo de su vida fundó 11 conventos. En 1771 inauguró el primer monasterio de religiosas pasionistas de clausura, que vivieron el mismo espíritu según la Regla escrita también por él. El 18 de octubre de 1775 el padre Pablo de la Cruz murió a los 82 años de edad. Fue beatificado por el papa Pío IX (noveno) el 1 de mayo de 1853 y canonizado el 29 de junio de 1867.