San Lucas - Encuentro con tu ángel

San Lucas

San Lucas el Joven, Eremita y Taumaturgo

7 DE FEBRERO

Lucas Del latín luminoso.

Lucas llamado el Joven o también conocido como «el taumaturgo» u obrador de milagros nació en el año 896. De una familia proveniente de una isla del Egeo, que se vio obligada a irse de ahí por los ataques de los sarracenos.
Con el tiempo se establecieron en Tesalia. Fue el tercero de siete hijos de Esteban y Eufrosina, hacendados campesinos. Con el tiempo Lucas piadoso y obediente cuidó las ovejas y cultivó los campos de la familia.
Desde niño, practicó la caridad, cuanto pudo compartió su alimento con los más pobres y, en ocasiones, les llegó a dar su propia ropa. Cuando salía a sembrar, esparcía la mitad de la semilla en las tierras de los pobres. Quien lo conoció dio testimonio de que Dios bendecía a su familia con cosechas en abundancia.
A la muerte de su padre, Lucas dejó la hacienda familiar y se dedicó a la oración. Se fue de Tesalia en la búsqueda de un monasterio, pero fue capturado por soldados que le creyeron un esclavo fugitivo. Después de algún tiempo descubrieron su identidad y lo pusieron en libertad, pero cuando regresó a su casa fue recibido con burlas por su fracasada fuga.
Hasta ese momento Lucas se quedó con el deseo de consagrar su vida a Dios, ya que sus familiares no querían dejarlo ir. En una ocasión dos monjes, que iban camino de Roma a Tierra Santa fueron atendidos hospitalariamente por Eufrosina.
Cuando se enteraron de la inclinación de Lucas hacia la vida religiosa; los monjes lograron el permiso con su mamá, quien lo dejó viajar con ellos a Atenas. En ese lugar entró a un monasterio, pero no se le permitió una estancia ahí por mucho tiempo.
El superior lo llamó porque en una visión había visto a su madre que le llamaba; por lo que Lucas regresó por segunda vez a su casa. Pero poco después y con 18 años de edad, salió nuevamente del hogar familiar y construyó una ermita en el Monte Joannitza cerca de Corinto, adonde se fue a vivir.
A partir de ahí la vida de Lucas se intensificó en la austeridad, pasaba las noches orando y casi sin dormir. A pesar de ello, llevó una vida plena y alegre. Hay muchos testimonios de quien lo vio en momentos de oración elevado del suelo.
Obró muchos milagros de curación, tanto en vida como después de su muerte; de la que no se sabe a ciencia cierta la fecha; acaecida aproximadamente entre los años 946 al 955. La ermita de san Lucas, fue convertida en oratorio y la llamaron Soteno o Soterion, que quiere decir; lugar de curación.