Nuestra Señora de la Merced
Advocación Mariana; Nuestra Señora de la Merced
24 DE SEPTIEMBRE
La Virgen de la Merced o Nuestra Señora de la Merced es una de las advocaciones marianas de la Virgen María. Es equivalente también el nombre de Virgen de la Misericordia. También se le llama: Generala de los Ejércitos Celestiales, la Mujer Vestida de Sol y la Reina de la Paz.
En castellano se le ha llamado en plural, Virgen de las Mercedes, que no corresponde con el sentido originario de la advocación. El significado del título «Merced» es ante todo «misericordia». La Virgen es misericordiosa y también lo deben ser sus hijos. Esto significa que recurrimos a ella ante todo con el deseo de asemejarnos a Jesús misericordioso.
El título mariano la Merced se remonta a la fundación de la Orden religiosa de los mercedarios fundada el 10 de agosto de 1218, en Barcelona, España por el Laico Pedro Nolasco.
En ese momento, la península Ibérica estaba dominada por los musulmanes, y los piratas sarracenos llegaban a las costas del Mediterráneo; ellos hicieron miles de cautivos y los llevaban al norte de África. La Orden religiosa tuvo como fin principal la redención de los cristianos cautivos.
La devoción a la Virgen de la Merced se difundió y arraigó profundamente en el Continente Americano; ya que los seguidores de la Orden de la Merced estuvieron entre los primeros misioneros que llegaron a la Isla de La Española o República Dominicana.
En México; es venerada como Patrona: en el Santuario de Nuestra Madre Santísima de la Merced, en Toluca Edo de México; en el Barrio de la Merced de San Cristóbal de las Casas, Chiapas; en la Parroquia de Santo Tomas Apóstol Momax, Zacatecas y en el Mercado de la Merced del centro del Distrito Federal.
La iconografía usada para representar a la Virgen de la Merced quedó definida a partir del siglo XVI; constituida fundamentalmente en el hábito mercedario: túnica, escapulario y capa, todo en color blanco con el escudo mercedario en el pecho.
Otros elementos recurrentes son las cadenas y el grillete, símbolos también del cautiverio. Normalmente, además del escapulario del hábito, lleva otro pequeño en la mano que ofrece a los fieles. Suele aparecer tocada con corona de reina, y también con el cetro en la mano derecha. En muchas ocasiones sostiene en la izquierda al Niño Jesús, que también puede llevar un escapulario en las manos.
En ocasiones cobija bajo su capa a un grupo de presos cautivos, pero también a santos, o personas de todas las clases sociales. Otro modelo iconográfico es el de la Comendadora, sedente en el coro, sin niño ni cetro, con las constituciones de la Orden en una mano. En el año 1696, el Papa Inocencio XII (doce), extendió la fiesta de la Virgen de la Merced a toda la Iglesia, y fijó su fecha el 24 de septiembre.