Santa Alfonsa de la Inmaculada Concepción
Santa Alfonsa de la Inmaculada Concepción; Religiosa Clarisa y primer Santa de la India.
28 DE JULIO
Alfonsa. Del germánico guerrero belicoso.
Alfonsa nació el 19 de agosto de 1910 en un poblado de Kerala; India. Fue bautizada 8 días después con el nombre de Ana; educada en el contexto socio-religioso de las familias católicas de rito siro-malabar; comunidad de los antiguos cristianos de Santo Tomás en la India.
Después de los estudios elementales; hacia el año 1928, Alfonsa pidió ingresar en el instituto de las Franciscanas Clarisas de Kerala. Vistió el hábito religioso el 19 de mayo de 1931; emitió la profesión simple en 1932 y la profesión perpetua el 12 de agosto de 1936.
En el período de 1930 a 1936; Sor Alfonsa sufrió de graves enfermedades y sufrimientos morales. Durante un año se dedicó a la enseñanza, pero la tuberculosis que padecía desde hacía años le impidió seguir.
A partir de 1939 padeció constantemente un sin fin de enfermedades dolorosas. Un tumor extendido por todo el organismo transformó su último año de vida en una continua agonía. Murió serenamente el 28 de julio de 1946
Su lema fue: “consumarse como una vela para iluminar a los demás”. Sor Alfonsa, durante su breve vida, no hizo grandes y extraordinarias acciones desde el punto de vista humano, pero su mensaje actual, eclesial y de incalculable valor es fácilmente perceptible.
Nos compartió que el dolor no es un mal, las pruebas y dificultades de la vida, aceptadas y sufridas con gozo por amor a Dios, son causa de méritos. Para adquirirlos no es necesario realizar acciones extraordinarias que llamen la atención: las cruces diarias, abrazadas con gozo por amor de Dios, exaltan la vida cristiana y nos permiten adquirir grandes méritos.
Santa Alfonsa de la Inmaculada Concepción fue beatificada el 8 de febrero de 1986 por San Juan Pablo II (segundo) y canonizada el 12 de octubre de 2008 por el Papa Emérito Benedicto XVI (dieciséis). Es honrada no sólo por católicos, sino también por brahmanes y mahometanos, que visitan su tumba y piden de su intercesión.