San Sabas
San Sabas, Abad
05 DE DICIEMBRE
Sabas. De origen hebreo, derivación de “Sabaeus”, un gentilicio de “Saba”, antiguo nombre de Arabia. Su significado es “lúcido”.
Sabas nació en Turquía en el año 439. Fue hijo de un comandante, que partió a tierras lejanas y lo dejó a cargo de un tío. A los ocho años, sufrió el desprecio de sus familiares, los cuales se rehusaron a educarlo.
Sabas se fue al monasterio de su pueblo por un tiempo, sin embargo en el 457 se trasladó al monasterio de Jerusalén fundado por Pasarión, pero éste no satisfizo sus aspiraciones.
Durante su permanencia en Alejandría; deseoso de soledad, pidió y obtuvo el permiso de retiro a una gruta, con el compromiso de su regreso todos los sábados y domingos para la vida comunitaria en el monasterio.
Se dedicó a una vida llena de oración y penitencia. Trabajó diez horas al día, hacía canastos y los vendía y con lo que obtenía llevaba alimentos a los más ancianos y débiles.
Cinco años después, de regreso en Jerusalén, fijó su domicilio en el valle de Cedrón en una gruta solitaria, a donde entraba por una pequeña escalera hecha con lazos.
Esa escalera reveló su escondite a otros monjes deseosos como él de soledad y en poco tiempo, como en un gran panal esas grutas inhóspitas se poblaron. Así nació la Grande Laura, uno de los monasterios más originales de la antigüedad cristiana.
Sabas, tuvo 150 monjes a su cargo cerca del Mar Muerto. Se ordenó sacerdote a la edad de 50 años por el Arzobispo de Jerusalén, y fue nombrado jefe de todos los monjes de Tierra Santa. Con la herencia que le dejaron sus padres construyó dos hospitales.
El Abad Sabas murió el 5 de diciembre del 532 a los 94 años de edad. En Roma, en el siglo VII, por obra de los monjes griegos surgieron sobre el monte Aventino un monasterio y una basílica dedicados a él.