San Leonardo de Noblac, Abad

06 NOVIEMBRE

Leonardo. De origen Germánico. Fuerte como un león.

Nació en Galia en tiempos del emperador Anastasio; entre el 491 y el 518. Sus padres, ambos de cuna noble, fueron amigos del Rey Clodoveo I, el jefe de los Francos y quien fue padrino de bautizo de Leonardo.

En su juventud no siguió la carrera de las armas y se puso al servicio de San Remigio, que en esa época era Obispo de Reims; Francia. El Obispo Remigio, llevo una buena amistad con el rey, y obtuvo el poder de conceder la libertad a los prisioneros.

Leonardo pidió y obtuvo un poder semejante, que ejerció muchas veces. El rey le concedió algo más: la dignidad episcopal. Pero Leonardo, agradecido, prefirió la vida de ermitaño en un lugar cercano a Limousin, Italia; en un bosque llamado Pavum y donde reunió a un grupo de seguidores.

Un día, su soledad se vio interrumpida por la llegada del rey Clodoveo. Con el rey iba también la reina, a quien precisamente en ese momento le vinieron los dolores del parto. Las oraciones y los cuidados de Leonardo hicieron que el parto saliera muy bien, en recompensa el rey le obsequió tierras reales en Noblac.

Allí fundó un monasterio alrededor del cual creció el pueblo, nombrado en su honor: Leonardo de Noblac. Hubo un número considerable de testimonios de prisioneros que lo invocaron desde su celda; al momento sus cadenas se rompieron ante sus ojos.

Muchos de estos presos llegaron con el Abad Leonardo. Un número considerable se quedó con él en parte del extenso bosque en la limpieza y preparación para el trabajo de los campos; con ello obtuvieron los medios de una vida honesta.

San Leonardo de Noblac, murió en el 559. Es el patrón de los presos políticos, personas encarceladas, los prisioneros de guerra, los cautivos y de las mujeres en trabajo de parto. Iconográficamente es representado como un Abad con unas cadenas ó candados y esposas.