Lectura del día 09 de Marzo 2017 - Encuentro con tu ángel

Lectura del día 09 de Marzo 2017

Lectura del día 09 de Marzo 2017

1ª lectura: No tengo más defensor que tú

Lectura del libro de Ester 4, 17k. I-z
En aquellos días, la reina Ester, presa de un temor mortal, se refugio en el Señor Y se postró
en tierra con sus doncellas desde la mañana a la tarde, diciendo:
«¡Bendito seas, Dios de Abrahán, Dios de Isaac y Dios de Jacob! Ven en mi ayuda, que estoy
sola y no tengo otro socorro fuera de ti, Señor, porque me acecha un gran peligro.
Yo he escuchado en los libros de mis antepasados, Señor, que tú libras siempre a los que
cumplen tu voluntad. Ahora, Señor, Dios mío, ayúdame, que estoy sola y no tengo a nadie fuera
de ti. Ahora, ven en mi ayuda, pues estoy huérfana, y pon en mis labios una palabra oportuna
delante del león, y hazme grata a sus ojos. Cambia su corazón para que aborrezca al que nos
ataca, para su ruina y la de cuantos están de acuerdo con él. Líbranos de la mano de nuestros
enemigos, cambia nuestro luto en gozo y nuestros sufrimientos en salvación».

Salmo: Sal 137, 1-2a. 2bc y 3. 7c-8

R. Cuando te invoqué, me escuchaste, Señor.
Te doy gracias, Señor, de todo corazón,
porque escuchaste las palabras de mi boca;
delante de los ángeles tañeré para ti;
me postraré hacia tu santuario. R.
Daré gracias a tu nombre,
por tu misericordia y tu lealtad;
porque tu promesa supera tu fama.
Cuando te invoqué, me escuchaste,
acreciste el valor en mi alma. R.
Tu derecha me salva.
El Señor completará sus favores conmigo.
Señor, tu misericordia es eterna,
no abandones la obra de tus manos. R.

Evangelio: Todo el que pide recibe

Lectura del santo Evangelio según san Mateo 7, 7-12
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Pedid y se os dará, buscad y encontraréis, llamad y se os abrirá; porque todo el que pide
recibe, quien busca encuentra y al que llama se le abre.
Si a alguno de vosotros le pide su hijo pan, ¿le dará una piedra?; y si le pide pescado, ¿le
dará una serpiente? Pues si vosotros, aun siendo malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros
hijos, ¡cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará cosas buenas a los que le piden!
Así, pues, todo lo que deseáis que los demás hagan con vosotros, hacedlo vosotros con
ellos; pues esta es la Ley y los profetas».