Lectura del día 26 de Julio 2019
Lectura del día 26 de Julio 2019
1ª lectura: La Ley se dio por medio de Moisés
Lectura del libro del Éxodo 20, 1-17
En aquellos días, el Señor pronunció estas palabras:
«Yo soy el Señor, tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de la casa de esclavitud.
No tendrás otros dioses frente a mí.
No te fabricarás ídolos, ni figura alguna de lo que hay arriba en el cielo, abajo en la tierra o en el agua debajo
de la tierra.
No te postrarás ante ellos, ni les darás culto; porque yo, el Señor, tu Dios, soy un Dios celoso, que castigo el
pecado de los padres en los hijos, hasta la tercera y la cuarta generación de los que me odian. Pero tengo
misericordia por mil generaciones de los que me aman y guardan mis preceptos.
No pronunciarás el nombre del Señor, tu Dios, en falso.
No pronunciarás el nombre del Señor, tu Dios, en falso. Porque no dejará el Señor impune a quien pronuncie
su nombre en falso. Recuerda el día del sábado para santificarlo.
Durante seis días trabajarás y harás todas tus tareas, pero el día séptimo es día de descanso, consagrado al
Señor, tu Dios. No harás trabajo alguno, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu esclavo, ni tu esclava, ni tu ganado, ni el
emigrante que reside en tus ciudades. Porque en seis días hizo el Señor el cielo, la tierra y el mar y lo que hay en
ellos; y el séptimo día descansó. Por eso bendijo el Señor el sábado y lo santificó. Honra a tu padre y a tu madre:
para que se prolonguen tus días en la tierra, que el Señor, tu Dios, te va a dar.
No matarás.
No cometerás adulterio. No robarás.
No darás testimonio falso contra tu prójimo.
No codiciarás los bienes de tu prójimo; no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su esclavo, ni su esclava, ni su
buey, ni su asno, ni nada que sea de tu prójimo.
Salmo: Sal 18, 8. 9. 10. 11
R. Señor, tú tienes palabras de vida eterna.
La ley del Señor es perfecta y es descanso del alma;
el precepto del Señor es fiel e instruye a los ignorante. R.
Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón;
la norma del Señor es límpida y da luz a los ojos. R.
La voluntad del Señor es pura y eternamente estable;
los mandamientos del Señor son verdaderos y enteramente justos. R.
Más preciosos que el oro, más que el oro fino;
más dulces que la miel
de un panal que destila. R.
Aleluya Cf. Lc 8, 15
R. Aleluya, aleluya, aleluya
Bienaventurados los que escuchan la palabra de Dios
con un corazón noble y generoso,
la guardan y dan fruto con perseverancia. R.
Evangelio: El que escucha la palabra y la entiende, ése dará fruto
Lectura del santo Evangelio según san Mateo 13, 18-23
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Vosotros, pues oíd lo que significa la parábola del sembrador:
Si uno escucha la palabra del reino sin entenderla, viene el Maligno y roba lo sembrado en su corazón. Esto
significa lo sembrado al borde del camino.
Lo sembrado en terreno pedregoso significa el que escucha la palabra y la acepta enseguida con alegría; pero
no tiene raíces, es inconstante, y, en cuanto viene una dificultad o persecución por la palabra, enseguida sucumbe.
Lo sembrado entre abrojos significa el que escucha la palabra; pero los afanes de la vida y la seducción de
las riquezas ahogan la palabra y se queda estéril. Lo sembrado en tierra buena significa el que escucha la palabra
y la entiende; ese da fruto y produce ciento o sesenta o treinta por uno».