Lectura del día 24 de Mayo 2018 - Encuentro con tu ángel

Lectura del día 24 de Mayo 2018

Lectura del día 24 de Mayo 2018

1ª lectura: Haré una alianza nueva y no recordaré los pecados
Lectura del libro de Jeremías 31, 31-34

Ya llegan días – oráculo del Señor – en que haré con la casa de Israel y la casa de Judá una alianza
nueva. No será un alianza como la que hice con sus padres, cuando los tomé de la mano para sacarlos
de Egipto, pues quebrantaron mi alianza, aunque yo era su Señor – oráculo del Señor -.
Esta será la alianza que haré con ellos después de aquellos días – oráculo del Señor – : Pondré mi ley
en su interior y la escribiré en sus corazones; yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo. Y no tendrán que
enseñarse unos a otros diciendo:
«Conoced al Señor», pues todos me conocerán, desde el más pequeño al mayor – oráculo del Señor -,
cuando perdone su culpa y no recuerde ya sus pecados.

Salmo: Sal 109, 1bcde. 2.3
R. Tú eres sacerdote eterno, según el rito de Melquisedec.

Oráculo del Señor a mi Señor:
«Siéntate a mi derecha, y haré de tus enemigos estrado de tus pies». R.
Desde Sion extenderá el Señor el poder de tu cetro:
somete en la batalla a tus enemigos. R.
«Eres príncipe desde el día de tu nacimiento entre esplendores sagrados:
yo mismo te engendré, desde el seno, antes de la aurora». R.

Aleluya Heb 5, 8-9
Aleluya, aleluya, aleluya.
Siendo Hijo,
aprendió, sufriendo, a obedecer. Y, llevado a la consumación,
se convirtió, para todos los que lo obedecen, en autor de salvación eterna. R.

Evangelio: Esto es mi cuerpo. Esta es mi sangre
Lectura del santo Evangelio según san Marcos 14, 12a. 22-25

El primer día de los Ácimos, cuando se sacrificaba el cordero pascual, mientras comían, Jesús tomó pan,
y pronunciando la bendición, lo partió y se lo dio diciendo:
«Tomad, esto es mi cuerpo».
Después tomó el cáliz, pronunció la acción de gracias, se lo dio y todos bebieron. Y les dijo:
«Esta es mi sangre de la alianza, que es derramada por muchos. En verdad os digo que no volveré
a beber del fruto de la vid hasta el día que beba el vino nuevo en el reino de Dios».