Lectura del día 18 de Marzo 2019
Lectura del día 18 de Marzo 2019
1ª lectura: Hemos pecado, hemos cometido crímenes
Lectura de la profecía de Daniel 9, 4b-10
¡Ay, mi Señor, Dios grande y terrible, que guarda la alianza y es leal con los que lo aman y cumplen sus
mandamientos.
Hemos pecado, hemos cometido crímenes y delitos, nos hemos rebelado apartándonos de tus mandatos y
preceptos. No hicimos caso a tus siervos los profetas, que hablaban en tu nombre a nuestros reyes, a nuestros
príncipes, a nuestros padres y a todo el pueblo de la tierra.
Tú, mi Señor, tienes razón y a nosotros nos abruma la vergüenza, tal como sucede hoy a los hombres de Judá,
a los habitantes de Jerusalén, y a todo Israel, a los de cerca y la los de lejos, en todos los países por donde los
dispersaste a causa de los delitos que cometieron contra ti. Señor, nos abruma la vergüenza: a nuestros reyes,
príncipes y padres, porque hemos pecado contra ti.
Pero, mi Señor, nuestro Dios, es compasivo y perdona, aunque nos hemos rebelado contra él. No obedecimos
la voz del Señor, nuestro Dios, siguiendo las normas que nos daba por medio de sus siervos, los profetas.
Salmo: Sal 78, 8. 9. 11 y 13
R. Señor, no nos trates como merecen nuestros pecados.
No recuerdes contra nosotros las culpas de nuestros padres;
que tu compasión nos alcance pronto,
pues estamos agotados. R.
Socórrenos, Dios, Salvador nuestro, por el honor de tu nombre;
líbranos y perdona nuestros pecados a causa de tu nombre. R.
Llegue a tu presencia el gemido del cautivo: con tu brazo poderoso,
salva a los condenados a muerte. R.
Nosotros, pueblo tuyo, ovejas de tu rebaño, te daremos gracias siempre,
cantaremos tus alabanzas de generación en generación. R
Aleluya Jn 6, 63c.68c
V: Tus palabras, Señor, son espíritu y vida;
tú tienes palabras de vida eterna.
Evangelio: Perdonad, y seréis perdonados
Lectura del santo Evangelio según san Lucas 6, 36-38
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Sed misericordiosos como vuestro Padre es misericordioso; no juzguéis, y no seréis juzgados;
no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados; dad, y se os dará:
os verterán una medida generosa, colmada, remecida, rebosante, pues con la medida
con que midiereis se os medirá a vosotros».